Introducción: la COVID-19 es una enfermedad que disminuye las capacidades pulmonares, aún más si la infección ocurre en pacientes con una afección cardíaca de base que pudiera influir en el sistema respiratorio. Estadísticamente la hipertensión es la afección vascular que más frecuentemente se relaciona con defunciones por el virus.

Objetivo: describir el curso clínico de un paciente hipertenso tras infectarse con COVID-19.

Presentación del caso: se presentó el caso de un paciente hipertenso desde hacía 26 años que inició con síntomas sugestivos de infección respiratoria. Tras ser examinado y con complementarios positivos se diagnosticó al paciente con enfermedad por COVID-19. Fue tratado en la Unidad de Cuidados Intensivos hasta su egresión vivo con marcada mejoría y exámenes para la infección respiratoria negativos.

Conclusiones: ante una presunta infección respiratoria, se deben indicar complementarios, incluyendo la reacción en cadena de la polimerasa. Una vez diagnosticada la infección, el paciente debe recibir terapia intensiva, monitoreo y tratamiento de complicaciones.

Introducción: la hipertensión arterial es una de las enfermedades crónicas no transmisibles que con mayor frecuencia observamos en la población y que puede desencadenar otras enfermedades cardiovasculares, además de constituir a su vez, un importante factor de riesgo cardiovascular.

Objetivo: caracterizar la ocurrencia en la población de la hipertensión arterial en el Consultorio Médico Familiar No. 9. Métodos: se efectuó un estudio descriptivo y transversal en pacientes con hipertensión arterial en el Consultorio Médico familiar # 9 en el período de enero a diciembre 2019. El universo estuvo compuesto por 1375 pacientes, de los cuales se seleccionó una muestra de 280 pacientes diagnosticados con la enfermedad. Los datos se obtuvieron a partir de las historias clínicas de los pacientes. Se manejaron variables como: sexo, edad, factores de riesgo.

Resultados: se pudo apreciar que la población objeto de estudio simbolizó el 20, 4 % del total de población del consultorio médico. El sexo femenino tuvo una mayor incidencia para un 57,1 %. Por rango de edad la más afectada fue la de 60-79 años para un 53,9 % y los factores de riesgos que tuvieron una mayor prevalencia fueron los antecedentes patológicos familiares (57,1 %) y la obesidad para un 48,9 %.

Conclusiones: el sexo femenino tiene una mayor afectación y la edad sobre la que más incide esta enfermedad es la de 60-79 años de edad; dentro de los factores de riego que favorecen la aparición de la hipertensión arterial se encuentran los antecedentes patológicos familiares y la obesidad.